Creatividad

UN ESPECTÁCULO

La función inició a la hora indicada en el tique, cinco y media en punto. En ese instante las luces se apagaron y se comenzó a oír una voz en off.
Días antes, por consejo de una amiga, cogió una entrada para el espectáculo, eran para una velada en la que tocarían diversas melodías, todas enmarcadas dentro del Jazz.
No era asiduo a ese estilo musical, pero reconocía que, en ciertos momentos, se hacía agradable oírlo.
No se le había ocurrido que, en todo el tiempo que llevaba viviendo por esos lares, existiera un salón de conciertos dos plantas por debajo de la sala en la que realizaban exposiciones a las que solía asistir, la más resaltante fue una sobre el mundo antiguo en la que pudo observar objetos que hasta entonces solo conocía por fotografías, ese día sintió que levitaba, tener tan cerca todo eso le resultó fascinante.
No fue complicado hacerse con la entrada, al ser socio de aquella institución tenía prioridad sobre otros para comprarla. Según la disposición del asiento comprobó que estaba a una buena distancia para observar el evento, en ese aspecto le pareció excelente la elección.
El día señalado se dispuso a salir pronto, tenía calculado que llegaría en cinco minutos. Cuando se aproximó a la puerta mostró el tique. Como aún faltaban varios minutos para que empezara el evento deambuló por ahí, fue así como escuchó que alguien le comentaba a la encargada de abrir y cerrar el acceso que esperaba a su pareja, asimismo le explicó que por cuestiones puntuales se había retrasado, por eso preguntó si se podía entrar o salir en cualquier momento, la respuesta fue clara, una vez empezada la función no podía entrar nadie, por respeto al público y a los artistas.
Entendiendo lo que le había dicho la encargada, se ubicó en su sitio. Escogió sentarse en el asiento par, tenía las entradas 17 y 18 en la fila 11, para ver si así atraía la suerte, una vez acomodado, no dejó de mirar en dirección a la puerta, lamentablemente la cerraron y tuvo que resignarse a ver solo el espectáculo.
Las luces se apagaron y una voz presentó a los artistas, de un momento a otro las notas musicales comenzaron a llenar el ambiente.
La acústica del lugar era buena, los sonidos de los instrumentos eran detallados y se escuchaba de lujo.
La gente a su alrededor se divertía, tarareaban, cantaban, se movían al ritmo, estaban encandilados.
El repertorio fue más interesante de lo que pensaba, la mezcla de temas le gustó. El recorrido que hicieron sobre aquel género musical fue sesudo.
En unas pantallas gigantes se podía apreciar a los intérpretes originales, sin duda, era una presentación bastante elaborada que cuidaba los detalles, no dando opción para que cualquier voz crítica pusiera en duda la calidad de esta.
Antes de concluir con el concierto hicieron que todos se pusieran en pie, también solicitaron que aplaudieran. Algunos lo daban todo, estaban poseídos por los sonidos. En ese instante pensó que le hubiera gustado ir acompañado, no disfrutar de aquello así, solo, sentía que se hubiera divertido más, ya que en compañía se gozaba de alegrías singulares.

APP

300

Dos