Hace poco fui a ver la última película de Guardianes de la Galaxia, por esas fechas se celebraba la fiesta del cine, una buena iniciativa para que los interesados se acerquen a estos establecimientos.
La sala estaba abarrotada, el público esperaba impaciente a que diera inicio la cinta, deseaba ver una obra que siguiera la línea de sus predecesoras y mantuviera la consistencia de su universo.
Durante la espera las ansias aumentaban (se denotaba por la inquietud de la gente sentada a mi lado), luego de unos minutos se apagaron las luces completamente y se inició el evento por el que todos estábamos presentes ahí.
Los Guardianes de la galaxia Vol.3 se estrenó en mayo de este año 2023 y fue dirigida por James Gunn. Su trama se centra, nuevamente, en el grupo de personajes que se encargan de salvaguardar la seguridad de la galaxia. Tras una aparente época de tranquilidad, luego de lo sucedido con Thanos, sus vidas se verán alteradas por la aparición de «El Alto evolucionador». Un científico que manipula los genes de las criaturas para llevarlas al más alto nivel de evolución, su fin es crear la especie perfecta que, por consiguiente, conformará la sociedad ideal.
La cinta está llena de flashbacks, por medio de ellos se dan saltos en el tiempo. Los hechos que se desarrollan en la narración están correctamente engarzados y dan detalles esenciales para entender lo que se está observando en pantalla, dan equilibrio a la historia.
El montaje juega un papel preponderante para conseguir este efecto, no se ve forzada la inclusión de escenas, aunque por momentos, aparentemente, no guardan relación, siendo este un recurso de posproducción esencial a la hora de dar forma al producto final.
Algo destacable, desde la primera película (o desde el Vol.1 como se añade al título), es lo adecuadamente definidos que están sus personajes, uno sabe distinguir las distintas representaciones que están en pantalla y lo consecuentes que son en la toma de sus decisiones, así como en sus reacciones durante el metraje.
Por otro lado, la inclusión de un villano del calibre de El alto evolucionador, abre las puertas del universo cinematográfico de Marvel a un personaje que se caracteriza por su megalomanía e incluso participa en confabulaciones para desestabilizar el orden del universo, su ceguera por conseguir la especie perfecta le hace perder de vista los destrozos que deja a su paso.
Tras concluir la película y comenzar a encenderse las luces, mientras esperaba para salir, escuché algunos comentarios, en su mayoría estaban disgustados por el desenlace de la obra, esperaban que se dieran más giros de guion o exponer más detalladamente las motivaciones del villano. Tal vez iban con expectativas demasiado altas, yo simplemente esperaba pasar un buen rato, básicamente a lo que voy al cine, no tenía expectativas predefinidas, porque sé lo que me puede ofrecer una obra de este tipo, no son de las que te harán pensar, te entretendrán y poca cosa más, por eso no le puedo pedir algo que no me va a otorgar.