Opinión

Una buena historia

Hace unos años vi Breaking Bad, una serie que con el paso del tiempo se convirtió en un referente gracias a sus buenas interpretaciones, su guion y a su buena dirección, mostrándonos a diversos personajes que, en mayor o menor medida, lograban cautivar al espectador.
De entre todo su elenco empatizábamos, sin mucho esfuerzo, con Saul Goldman, a pesar de ser un abogado corrupto y sin escrúpulos, una vez en pantalla, debido al carisma que le otorgaba el actor Bob Odenkirk, olvidábamos que era un ser deleznable que se dedicaba a defender a miembros del hampa, pues el dinero era lo esencial, viniera de dónde viniera. Cualquiera que pudiera pagarle era digno de sus servicios.
Tras concluir esta realización en 2013 se ideó la producción de un spin-off centrado en Goldman llamado: Better Call Saul.
Su primera temporada se estrenó en el 2015 y la última, hace poco, en el 2022. Durante sus 63 episodios se centró en narrarnos los orígenes del personaje encarnado por Odenkirk, haciendo hincapié en las motivaciones del protagonista. De tal modo que durante sus seis temporadas nos detalla las causas por las cuales Saul se convierte en un ser sin escrúpulos y manipulador, centrándose en los entresijos de su pasado. Asimismo, en el proceso nos presenta a nuevos personajes que intervienen directa o indirectamente para que esto se produzca, en este contexto somos testigos de su evolución, los cambios que se producen en su comportamiento y como destacan en el desarrollo de la trama.
Por esta razón esta serie no escatima en esfuerzos a la hora de explorar el mundo de la moralidad y las consecuencias de las acciones de sus arquetipos, dejando claro el determinismo que condena su existencia, no pueden escapar a su destino, aunque por un periodo parezca que lo consigan, al final terminan siendo presas de él, es decir no pueden ir en contra de la resolución de su creador quien, desde un inicio, ha decidido cuál será su fin.
Asimismo, su guion, plagado de diálogos audaces e inteligentes, permite el correcto funcionamiento de su propuesta, ya que consigue que su narrativa sea trepidante, con unos saltos temporales exquisitamente engarzados que, en lugar de romper la continuidad de la historia, la hacen más versátil. Los guionistas son sutiles a la hora de dejar mensajes sueltos por todas partes, mensajes que solo podrán ser percibidos por aquellos que estén atentos a lo que acontece en pantalla.
Por otro lado, otro aspecto esencial dentro de la realización es su fotografía, debido a que es uno de los pilares que hace de esta serie algo atractivo, siendo destacable la mezcla de escenas a color y otras en blanco y negro.
Hasta el final uno no deja de empatizar con Goldman, aunque daba la impresión de que se iba a salir con la suya, este busca redimirse y decide recibir el castigo que se merece, por ende, pone fin, voluntariamente, a sus aventuras, porque es consciente de que terminará siendo atrapado por su pasado, no puede evitar ser quien es.

Lume

Agli