Desde hace un tiempo varias plataformas ofrecen la posibilidad de tener beneficios en sus entornos si te haces con una suscripción de pago, los equipos comerciales de las mismas sostienen que al hacerlo se tendrá acceso a funcionalidades ocultas, no disponibles para los usuarios de a pie. Por una módica suma puedes utilizar herramientas personalizadas, adaptadas a tus necesidades, para tener una mejor experiencia que no se verá interrumpida por anuncios comerciales o, en su defecto, por la imposibilidad de elegir filtros que harían más satisfactorio la estancia.
Por eso machacan constantemente con la muletilla: coge una suscripción de pago, confían en su estrategia, que a fuerza de aplicarla te canses, cedas y termines inscribiéndote en sus planes especiales.
De este modo, si quieres ver un video sin publicidad tienes que pasar por caja, con la cantidad de anuncios que muestran cada vez que se entra, deberían darse por servidos, también, el usuario, debería recibir algo a cambio, no solo el contenido, por perder el tiempo con ella.
Esto también se da en las páginas de diarios virtuales, solo exponen un trozo de la noticia que quieres, lo demás está difuminado, si pretendes leerla completa te dicen que el contenido es exclusivo de sus abonados, de tal modo que con ello te invitan a retirarte de este lugar, no es para ti, es para quienes nos dejan algunas monedas, con esto hacen una declaración de intenciones.
Recuerdo cuando comencé a navegar por los entornos virtuales, finales de los noventa más o menos, se podía acceder a casi todo de forma gratuita, eran pocos los que veían la posibilidad de ganar dinero en esos medios. Aún se mantenía el espíritu de aquellos que impulsaban esta nueva tecnología, pues consideraban que debería estar abierta a todos, no había la figura de pagar por un servicio premium, pero con el paso del tiempo hubo gente que vio una oportunidad de ganar dinero con lo que producía, por eso mismo comenzaron a invertir esperando que les dejara algunas ganancias en el proceso.
Por eso hoy, si bien todos los entornos ofrecen una opción gratuita, por lo general esta no tiene demasiadas funcionalidades, la experiencia está capada, como diría alguno de mis colegas, por eso te recuerdan que si pagas su plan premium tendrás ventajas difíciles de obviar, cosa que no sucede en el plan básico, al que tiene acceso cualquiera, por el contrario, en el otro perteneces a un club exclusivo, yo no quiero pertenecer a un club que me acepte como miembro, como diría Marx.
En la actualidad casi todo en la red de redes va enfocado a ganar dinero, sin embargo, al limitar la experiencia en sus entornos conseguirán que los usuarios no entren más, porque nadie quiere que le hagan sentir indigno por negarse a pagar una suscripción. Es cierto que cualquier servicio (o producto) que se brinda debe ser retribuido, pero recordemos que se paga por tener Internet, no es un servicio gratuito, por lo tanto, ya hacemos un pago por navegar en las redes, es algo que solemos olvidar o quieren que olvidemos.