Reseña

Planes repetitivos

Me senté a ver la televisión para pasar el rato, quizá me decantaría por una película, pero no tenía claro lo que me apetecía. Otras veces lo tengo decidido, voy a tiro fijo, pero esta no fue una de esas ocasiones. Comencé a dar vueltas por varias plataformas de videos por demanda que tengo contratadas, esperaba encontrarme con una producción nueva, que aún estuviera en cartelera, sin embargo, fue más complicado hacerlo, ya que, si bien, ofrecían la posibilidad de ver cintas recién estrenadas, querían cobrar una cuota extra, como una especie de entrada, cosa que no iba a hacer, pues para ello ya tengo las salas de cine.
Descartado lo de ver un estreno, opté por bajar mis expectativas (tenía que adecuarme a las circunstancias), por eso me centré en alguna de las novedades, pensando en que, al tener cientos de títulos disponibles, no sería difícil dar con una que, por lo menos, no hubiera visto.
Me encontré con diversas recomendaciones, venían con la muletilla: «Por qué has visto…», quizá iba en la línea de lo que podría gustarme, a pesar de sus buenas intenciones, no atinaron con lo que estaba dispuesto a ver. Su algoritmo, como suele suceder conmigo, se volvió a equivocar.
Desencantado por esas recomendaciones, comencé a hurgar en sus categorías. A veces su mejor contenido no está a la vista, es necesario dar un par de vueltas en su catálogo, pero al no obtener frutos me dije que me quedaría con una producción al azar, no obstante, al ver el resultado, no quedé satisfecho, el tema de esta no me gustaba, a pesar de haber bajado mis expectativas tenía que encuadrarse dentro de mis parámetros. Salí de esa selección, no estaba dispuesto a darle una oportunidad, quería algo que me gustara y entretuviera (era lo mínimo exigible).
En tal tesitura, recordé alguna charla que tuve, con respecto a esto de estar dando vueltas dentro de estas plataformas, al tener delante tantas opciones uno no se decide (la oferta es desmesurada), se ha llegado a un punto en el que uno se entretiene buscando y no disfrutando de una buena realización. Se puede malgastar mucho tiempo haciéndolo.
Asimismo, me comentó que era muy usual y al final uno se queda como al principio, por ende, el tiempo que se dedica a esta acción se podría emplear en otra actividad más sustancial. En esto estuvimos de acuerdo, era un problema.
Después de seguir dando vueltas, no llegué a quedarme en ninguna realización, decidí poner un evento deportivo, así iba a algo seguro, a algo que me gustaba y, aunque no jugaba el equipo al que suelo alentar, se enfrentaban dos conjuntos que me aseguraban un buen encuentro.
Fue así como terminé mi fin de semana, haciendo lo de siempre, sin ver algo que fuera novedoso, a causa de lo repetitiva de la oferta en las plataformas online, que solo tienen pocos títulos interesantes y que se suelen ver en pocos días, una vez que eso sucede lo demás no está al mismo nivel, sabe a nada.